sábado, 9 de marzo de 2013

Los juegos políticos

El Intransigente
Rodolfo Urtubey, Coordinador del Fondo de Reparación Histórica, se refirió a la imagen del actual Diputado nacional Alfredo Olmedo y destacó que "tranquilamente puede ser Gobernador de Salta".

El Coordinador del FRH dijo tener coincidencias y que "lo que nos une es un interés común de la política".
Además aseguró respetar el hecho de que "Olmedo podría haberse quedado a administrar la fortuna de su familia pero optó por la política que es lo que lo apasiona, yo rescato esa posición".
Finalmente consideró que que el Diputado “tendrá que buscar un espacio entre el modelo político de Juan Carlos Romero y el modelo político de Juan Manuel Urtubey. Por ahí podrá mostrar un aspecto original que le de una personalidad en esta disputa".
¿Cómo interpretar estas palabras? 

Alguien incauto podría sostener que Urtubey está reconociendo su afinidad con Olmedo, pues en realidad habría alguna lealtad superior que los hace coincidir en el mismo espacio (el eufemístico "interés común de la política" del que habla el hermano del gobernador). 

Sin embargo lo que está diciendo Urtubey queda en claro cuando sostiene que quiere que Olmedo se defina como romerista o como urtubeycista, como opositor o como oficialista. El elogio sólo es un burdo intento para convocar a Olmedo a una de esas negociaciones que tanto abundan en el mundo de la política a la hora de disputar cargos electivos, pues Urtubey -debido a los números que figuran en las encuestas que circulan en Salta- se está quedando fuera del Senado a menos que haga algo drástico. Es decir, hoy por hoy, Alfredo Olmedo tiene una leve ventaja en la intención de voto por sobre Juan Carlos Romero, quedando Rodolfo Urtubey en un lejano tercer lugar; de allí la necesidad de este último aspirante a dar un golpe de efecto para conseguirse un lugar. 

La ambición del pejotismo pretende arrastrar a Olmedo a las prácticas clásicas de la política. Rodolfo Urtubey, con su actitud tan típica de aquella gente que vive para que el Estado le financie su vida, ha dado a entender que Olmedo no "es original"... y dio en el clavo. No "ser original", en el lenguaje que estos politiqueros hablan, significa que él es un hombre sin sutilezas ni ambigüedades, un salteño más que quiere lo mejor para Salta, un hombre del pueblo que no habla como político sino como ciudadano, alguien que no juega a la política sino que la pone al servicio de la gente. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario